Aunque cada vez se oye más hablar sobre Fisioterapia del suelo pélvico, esta disciplina sigue siendo en la actualidad una gran desconocida. Quienes creen saber en qué consiste, a menudo tienen una idea parcial de lo que implica, pensando que sólo es necesario acudir a ella después de haber dado a luz o una vez llegada la menopausia.

La Fisioterapia pelviperineal procede de la unión de dos términos “pelvis” y “periné”. Ésta es una disciplina terapéutica que permite evaluar y tratar disfunciones del suelo pélvico y de la esfera sexual que acompañan a la mujer en las diferentes etapas de su vida y al hombre después de una cirugía de próstata.

También pueden necesitar un tratamiento preventivo o rehabilitador las mujeres que no hayan tenido embarazos ni estén en periodo premenopáusico, pero sí practiquen deportes de alto impacto (running, atletismo, levantamiento de pesas, tenis), así como los hombres que jamás hayan pasado por un quirófano para que les realicen una prostatectomía. Incluso los niños pueden tener problemas de suelo pélvico si, por ejemplo, siguen haciéndose pis en la cama con más de siete años, podemos hablar de incontinencia urinaria nocturna.

Algunas de las disfunciones de suelo pélvico en las que puede ayudar la fisioterapia pelviperineal son:

* Incontinencia urinaria

* Polaquiuria (aumento del número de micciones)

* Prolapsos (descenso de vísceras)

* Dolor perineal

* Incontinencia fecal o de gases

* Estreñimiento crónico

* Refuerzo de la musculatura durante y después del embarazo

* Disfunciones sexuales

Existen mujeres y hombres que padecen problemas de suelo pélvico y merecen ser tratados por fisioterapeutas especializados para que le ayuden a mejorar su calidad de vida, ofreciéndoles una alternativa viable al uso de compresas o pañales.